Esto no es como me lo contaron

O de cómo ser la madre que nunca pensaste que serías

Obstáculos

13 comentarios

Llegó al trabajo aquella mañana como un día más pero no iba a ser un día cualquiera, una llamada de la encargada las puso sobre aviso: «Creo que me van a despedir»  el pitido insolente del teléfono nos alertó a las demás al tiempo. Y la despidieron. Así, de un rato para otro 14 años de dedicación dejaban de valer. No se trataba de que ella trabajara mal, una mera razón económica bien argüida por el propietario del local la dejaba en la calle. Impotentes, las otras cuatro participábamos de la injusticia desde el otro lado del invisible hilo. Nadie dijo que la vida fuera justa, pero a veces es demasiado injusto ver cómo se ceba con los mismos y la cola del paro no es desconocida en su casa. Ahora no sabe por dónde tirar, pero por ella y por su familia tiene que buscar un camino cada día.

Igual que se levanta cada mañana otra de ellas y afronta su ya no reducida jornada laboral, obligación que asume consciente de que, de no hacerlo, hubiera tenido que prescindir de su trabajo. Sufre por perderse un sólo segundo de la vida de su hija, porque estar separadas es regalar demasiado a quien no entiende que estar más horas no ayuda a ser más eficiente, sólo te hace más infeliz. Y nos lo cuenta a través de ese sistema de mensajería desde el que hace unos meses nos dio la increíble noticia «Está en el hospital».

Un accidente cerebrovascular hace unos meses vino a reubicar las prioridades de la tercera mujer. Siempre ha sido una mujer sensata, pero desde que le ocurrió es, además, muy sabia. Se ha recubierto de esa paz que traspasa pantallas y te abriga el alma sólo con leer sus palabras. Se cuida porque aún le quedan secuelas y cada día avanza un pasito más. Sus dos hijos también la cuidan, conscientes de que mamá no puede hacer lo mismo que antes aunque está en el camino para conseguirlo. Es un ejemplo para todas nosotras y nos enseña muchísimo en esa sala en la que nos leemos cada jornada.

La cuarta increíble mujer perdió su origen hace poco. Cada día la piensa y la echa de menos como solo puede extrañarse a una madre. La organización familiar también se le ha complicado con la pérdida porque la increíble madre de la increíble mujer era también su comodín, la que le ayudaba en el encaje de bolillos del día a día. Pero respira y camina y la llora cuando toca y, aunque maldice lo pronto que las separaron, sonríe por la fortuna que tuvo de disfrutar a la gran mujer que le enseño a ser.

¿Y yo? Yo las leo a todas ellas y admiro su tesón, su capacidad para saltar los obstáculos (o rodearlos) y continuar. Siempre están al pie del cañón, siempre tirando del carro. Entregadas madres, grandes profesionales, que se enfrentan al mundo con la cabeza alta y con ganas de cambiar las cosas. Por más piedras que les pongan en el camino, por más que tengan que remar contracorriente, siguen perseverando. No pueden ser mejor espejo para reflejarse. Yo me quedo cerquita de ellas, porque con un poquito que se me pegue seré una gran mujer.

Autor: Let

Me llamo Leticia, Let para los amigos, y siempre he querido escribir. Tengo montones de libretas con bosquejos de historias que se han quedado congelados. Tengo una novela en camino que algún día llegará.

13 pensamientos en “Obstáculos

  1. Ya eres una gran mujer. Muuuuac!

  2. Eres y serás siempre una gran mujer. Una mujer que tiene que cambiar el tiempo que desearía pasar con su hijo por demasiadas horas en la oficina, y sigue sonriendo, una mujer que siempre tiene un abrazo o una palabra de aliento, que hace de unas palabras una frase para enmarcar, que sueña y se esfuerza por lograr ese sueño. Una mujer a la que le quedan unos labios rojos de rompe y rasga y que sus ojos lo dicen todo…Esa eres tu!
    Y es una suerte que yo te pueda tener a tu lado, a ti y a todas estas mujeres y enriquecerme tanto con vosotras.
    Me has emocionado tanto…
    Decirte que te quiero y que tengo muchas ganas de volver a abrazarte y hablar y hablar y que las horas se hagan segundos, que los peques se conozcan y jueguen, y si estuviésemos todas ya sería la leche!
    Muacks!!! Te adoro!

  3. Yo sencillamente no sé qué decirte, porque las lágrimas se atropellan… Solo te remarco lo que te he dicho esta mañana. Eres una mujer increíble, una gran mujer, sin necesidad de fijarte en nada de lo hay fuera, ni en nadie. Simplemente con lo que tienes en tu interior.
    Que nada ni nadie te haga creer lo contrario.
    Un abrazo gigante, amiga!

  4. Tu ERES y siempre lo has sido UNA GRAN MUJER! No lo dudes ni un instante; tienes un don de palabra que ya muchas quisiéramos tener! Te has plantado ante mucha gente para hacer valer tu lactancia y tus decisiones de crianza.
    Gracias por esas líneas que nos dedicas a cada una de nuestro salón de té! El cuál no sería lo mismo sin ti!

    Un beso enorme! (Y con un gran nudo en la garganta)! Muasss

  5. Grandes retratos de ENORMES mujeres (intuyo que reales, y alguna creo reconocer por su blog), heroínas todas de lo cotidiano. Hay que tener el corazón muy grande para describirlas así; y hay que tener una empatía por sus dolores de la q sale de las entrañas. Esa manera de contarlas te dibuja a ti (al menos en en mi cabeza), como una persona sensible, sincera y auténticamente hermosa (por dentro, por fuera intuyo por las ilustraciones del blog q lo eres).
    Chapeau por tener esos ojos capaces de captar tanto, y esa «pluma» virtual maravillosa para hacerles (y hacerte) este bonito homenaje.
    Te sigo leyendo!
    Un abrazo y enhorabuena!

  6. Chapeau, a dos de ellas las reconozco y las admiro.Y te digo lo mismo con lo que sabes, lo que vales y tus frases de coach y laminas llegaras muy lejos y además te lo mereces, un besazo

  7. Por lo poco que sé de ti, creo que eres grande, siempre vamos a ser grandes para alguien, para nuestros hijos, alguien a que ayudemos, alguien que nos imite,…
    Así que cabeza alta, y vamos a por el mundo!!
    Besos

  8. Bufffff la piel de gallina tengo, me ha encantado. 4 grandes mujeres que tienen la suerte de tenerte como amiga.
    Besos

  9. Cuando hablan del papel de la mujer como el sexo débil, me río yo. Cuatro mujeres poderosas, sabias, grandes, luchadoras y hermosas, tanto por dentro como por fuera, pero sobre todo por dentro. Reconozco a tres, pero desde aquí os mando un beso a todas.
    SOIS MUY GRANDES! Os quiero!

  10. Las dos cosas! Me ha gustado y me ha removido. Menudas 4 super mujeres!!! Madre mía!!!!
    Yo creo que de tanto juntarte mucho ya se te ha pegado 😉

  11. Grandes mujeres en actos y palabras. Como tu, ya lo sabes, que eres la primera en dar un paso adelante para ayudar/animar al resto!!!

  12. Me ha encantado el analisis que has hecho de estas cuatro mujeres, sin duda luchadoras, valientes y madrazas……no te conozco lo sufiente, pero supongo y me fio de lo que las que te conocen dicen de tí. A partir de ahora tienes una fiel seguidora.

  13. Gran suerte que tengo d poder compartir algún ratico con las mujeres que nos refieres, mujeres que como tu luchan cada día por salir adelante llevando por delante a lo mas bonito de sus vidas, a su motor diario.
    No sabes cuanto daría por tener mas tiempo que dedicaros, para conoceros.
    Sigo mi lucha desde este rinconcito. Un beso fuerte.

Replica a Virginia A. C. Cancelar la respuesta